La innovación tecnológica ha avanzado significativamente en la última década comparado con los inicios de la tecnología en la revolución industrial. El crecimiento de la productividad a la mano de la tecnología fue del 0.6% de 1995 al 2005, y se predice que será del 0.8 hasta el 1.4% desde el 2015 hasta el 2065. Estas cifras contemplan IT y los procesos de automatización que estamos descubriendo ahora. Aunque la tecnología aún está muy lejana a reemplazar la calidad humana en el trabajo, sí que nos beneficiamos de su empleo en el día a día; a continuación te decimos algunas tendencias de innovación tecnológica para las empresas.
Tecnología = flexibilidad
Los trabajos remotos llegaron para quedarse. Uno de los aspectos positivos de la pandemia fue este, y ha demostrado un incremento en la productividad de las personas empleadas alrededor del mundo. Las herramientas de acceso remoto con las que convivimos a diario ya no nos sorprenden. Teléfonos móviles, computadoras portátiles, aplicaciones y softwares nos facilitan la vida a la hora de trabajar, brindándonos la capacidad de trabajar a cualquier hora en cualquier parte del mundo. También proporciona a las empresas las condiciones necesarias para detectar carencias en el aprendizaje del talento y actuar para reducirlo.
Del mismo modo, mudar la información generada internamente por las empresas a nubes de almacenamiento garantiza esa misma flexibilidad. Las nubes son herramientas que proporcionan accesibilidad a las personas empleadas para trabajar en cualquier parte del globo. Cualquier información que se encuentre en la nube puede ser vista hoy y en el futuro cercano desde cualquier dispositivo, asegurando la conectividad inmediata y de fácil acceso a las personas empleadas para realizar sus actividades cotidianas resaltando los beneficios de la tecnología en las empresas.
Las empresas utilizan herramientas de transformación digital para realizar el upskilling necesario de su fuerza laboral, empleando sistemas avanzados de aprendizaje (ALMS por sus siglas en inglés), lo que directamente beneficia el clima laboral. Cuando las personas de una empresa se sienten motivadas y empoderadas por ser capaces de crear su propio ritmo de aprendizaje, con sus propias reglas, dentro de plataformas online, la productividad incrementa.
Otra tendencia tecnológica que permite ampliar la visión estratégica de la empresa es data analytics. Las personas en puestos gerenciales pueden acceder a información exacta con estadísticas pertinentes al tema sujeto a análisis, así como medir sus errores y anticipar problemas. Además, permite estandarizar procesos, agilizar tareas y soportar acciones con datos duros, potencializando los recursos que se tienen al alcance.
La seguridad es primero
Hoy se recomiendan factores múltiples de inicios de sesión, con diversos canales de autorización que correspondan a involucrar a las personas usuarias directamente, por ejemplo, con la autenticación de la huella digital, escaneo del iris o patrones de tecleo. Con esto nos referimos a ir más allá de una simple contraseña y usuario, pues este tipo de filtros de seguridad ya son insuficientes y obsoletos ante el avance de la ciberseguridad. Todo lo anterior para mantener un blindaje impenetrable corporativo tanto de la información de su fuerza laboral como de los procesos o activos de la compañía. Estos factores de autenticación múltiple pueden ir acompañados de la comprobación de direcciones IP autorizadas, geolocalización, equipos autorizados, reconocimiento facial, entre muchos otros antes de siquiera permitir el acceso remoto seguro a cualquier información protegida.
El legado de las nuevas generaciones ya está presente en los avances tecnológicos que mejoran la salud mental y física laboral. Se han creado teclados, ratones y sillas ergonómicas que van más allá de nuestras expectativas, valoraciones y conocimientos de hace una década. Los escritorios nos solo son ajustables, sino que también son inteligentes para mantenernos activos, alertas y con una postura adecuada en el trabajo. Las pantallas se configuran de acuerdo con nuestras necesidades personales ópticas y contribuyen a evitar el daño a nuestros ojos. Hoy, nuestros accesorios, mobiliarios y espacios laborales responden a la necesidad de comodidad para ser capaces de un rendimiento óptimo laboral diario.
En conclusión, la tecnología avanza sin dejarnos atrás, muy por el contrario. La fuerza de trabajo humana y sus demandas salen ampliamente beneficiadas de los avances tecnológicos; ser reemplazados como humanidad en el ámbito laboral, es un panorama aún lejano. Si bien muchos procesos están automatizándose rápidamente, no están eliminando el factor humano en absoluto, sino redirigiendo sus esfuerzos hacia la optimización y mejoría de resultados en las empresas. Los beneficios de calidad de vida laboral de los que podemos gozar aprovechando las nuevas tendencias tecnológicas no deben ser obviados, sino explotados al máximo para nuestra holgura y comodidad laboral.
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