*contenido tomado de Fundación Adecco
Una vez has encontrado un empleo, es posible que, con el tiempo, sientas que mereces un salario mayor. En este caso, puede ser una buena idea reunirte con tu superior y/o jefe directo para solicitar una revisión del sueldo al alza. No existen fórmulas mágicas para lograr este aumento de salario, ya que depende de muchos factores como la situación financiera de la empresa, pero aquí te dejamos algunas claves para tener éxito. ¡Toma nota!
Antes de lanzarte a pedir un aumento de sueldo, es importante que tengas claros los motivos. ¿Por qué crees que mereces una subida salarial? Haz una lista de los argumentos y preséntalos de forma ordenada en la reunión. Recuerda que las razones para que la empresa te suba el sueldo siempre van a a estar ligadas a tu productividad, así que pon el foco en este punto. Por ejemplo:
También puedes poner en valor tu compromiso con la organización y lo involucrado que estás con el proyecto empresarial. Por ejemplo: siempre estás dispuesto a trabajar fuera de horario, ayudas a los compañeros que lo necesitan, sientes los logros de la compañía como tuyos, etc.
Tan importante como tener claros los argumentos, es encontrar el momento perfecto para pedir una subida salarial. Es mejor solicitar una reunión cara a cara con tu superior directo, si no puede ser en persona, por videollamada. Recuerda que ante todo se trata de una conversación entre dos personas adultas y que debes transmitir cercanía y generar empatía. Cuando expongas los motivos, mantén siempre el contacto visual y procura hablar con seguridad: el titubeo o el tono de duda puede poner en entredicho tus argumentos, haciendo que parezcan menos convincentes.
Además de recordar los logros que has alcanzado en el desempeño de tu trabajo, comenta las ideas o planes de futuro que tienes para seguir mejorando y/o creciendo en tu puesto de trabajo. Es decir, es importante que tu superior sepa que, una vez te suban el salario, seguirás igual o más ilusionado con tu trabajo en la empresa.
El tono con el que solicitas una subida salarial debe ser siempre asertivo, es decir, honesto y firme, pero sin ser agresivo ni tampoco demasiado apocado. En el término medio está la virtud. Si pides un aumento salarial en tono enfadado, puede sonar a ultimátum y es muy posible que incomodes a tu superior, generando el efecto contrario. De modo que habla a tu interlocutor en el tono en el que deseas que te responda.
Si solicitas una subida concreta de tu salario (por ejemplo, de un 5 o 10%) puede sonar muy rígido y restar margen de maniobra a la negociación. Seguro que tienes más éxito si solicitas una revisión de tu rango salarial al alza.
Las razones por las que te mereces una subida salarial siempre deben estar relacionadas con tu desempeño y nunca con lo que cobra otro compañero. El comentario de: «X persona trabaja menos y cobra más» te dejará en mal lugar y el interlocutor percibirá que estás entrometiéndote en un tema que no es de tu incumbencia. Por otra parte, circunstancias como la edad («tengo ya 50 años y debo cobrar más») tampoco deben servir para argumentar una subida salarial.
Si a pesar de poner en práctica todo lo anterior no consigues ese aumento de sueldo, es importante que escuches los motivos de la empresa. Es probable que su situación financiera no sea la mejor o que considere que actualmente no es el momento para hacerlo. En este caso, te recomendamos lo siguiente:
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